Terrores Nocturnos

Alexa es una profesora de universidad de Nueva Eire, donde vive una vida aparentemente normal. Por las noches, en cambio, sufre de terrores nocturnos, o lo que ella cree que son terrores nocturnos, porque la línea entre la realidad y los sueños es más frágil de lo que parece, y cuando conoce a Samael la historia está servida.

Este libro es el primero de la saga, aunque aún no se han publicado el resto. Tengo la suerte de contar a Nieves H. Hidalgo entre mis amigas, pero este libro lo leí antes de conocerla, y de hecho fue mi opinión sobre él la que nos hizo conocernos (por lo que siempre estaré en deuda con este libro, ya que me permitió conocer a una bellísima persona). Dicho esto, intentaré hacer una reseña lo menos influenciada posible por esta amistad. En un primer momento, la portada y el título me sugirieron una historia de terror, y la sinopsis me cautivó los suficiente para leerlo (tengo pesadillas desde pequeña, ¿cómo no iba a interesarme?). Sin embargo, el libro no es una historia de terror, aunque haya partes terroríficas, sino que se encuadra más en el género de la fantasía y romántica paranormal. Alexa descubrirá que forma parte de un mundo que ni sabía que existía, y que ella es una pieza clave en los acontecimientos que están por llegar. Los personajes están muy bien construidos, Alexa tiene un sentido del humor que me encantó y Samael... me enamoró. Otro personaje importante en la historia es Dana, la mejor amiga de Alexa, que también está muy trabajada. A pesar de ser una novela larga se lee fácilmente y, aunque como he dicho antes forma parte de una saga, es autoconclusivo en su historia (pero dejando cabos sueltos para continuar, y abriendo un poco las puertas a la siguiente novela en el epílogo). No puedo concluir esta crítica sin mencionar las escenas de sexo, que son muy explícitas, pero no os dejéis llevar por eso, no estamos ante una novela erótica. En definitiva, una historia muy recomendable... ¡Estoy esperando el resto de la saga!